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12va. Colección “Arte de Café” de Casa Cuesta exalta obras de Antonio Prats Ventós

12va. Colección “Arte de Café” de Casa Cuesta exalta obras de Antonio Prats Ventós

SANTO DOMINGO.- A partir de este jueves 21 de mayo, está disponible en Casa Cuesta la décima segunda entrega de la colección “Arte de Café”, tradición esperada cada año por el público, y que en esta ocasión está engalanada por las obras del prestigioso pintor y escultor Antonio Prats Ventós, en las cuales cobran vida la mezcla étnica, el color y el calor de nuestro trópico. Sus figuras femeninas estilizadas ensalzan a la mujer criolla.

La vicepresidenta de Casa Cuesta, Beatriz Puello, informó que la colección está compuesta por 2 sets de 2 tazas de café, 2 sets de 2 platos decorativos de postre, 3 platones decorativos redondos, 4 platos pequeños de servir, un platón cuadrado, 1 cafetera, un set de azucarera y cremera y un platón decorativo rectangular.

Al intervenir en la presentación de esta décima segunda entrega anual, la ejecutiva del grupo CCN explicó que “Casa Cuesta pone en manos de sus clientes exquisitas piezas de colección que exaltan la obra de consagrados artistas plásticos”.

Manifestó que “Arte de Café” forma parte de las iniciativas que realiza la empresa a través del proyecto “Orgullo de mi Tierra”, en su búsqueda de Tesoros Dominicanos, donde encontramos hombres y mujeres que materializan con su obra nuestra identidad.

Entre ellos citó a los programas que forman parte de esta iniciativa como son Colección Blanco & Negro de Teófilo Cruz, A Ritmo de Joyas, Colecciones de Moda Jumbo, así como el apoyo a producciones discográficas y artísticas criollas”.

Sobre “Arte de Café”

En el 2003, fue presentada la primera colección, presentando como invitado al afamado pintor Dionisio Blanco, quien en cada una de las piezas dejó plasmado el sello de los "Sembradores" y "Campesinos sin rostro".

En el 2004 el colorido de la pintura de Guillo Pérez protagonizó la propuesta, motivando a los clientes a adquirir la colección.

La tercera entrega realizada en el 2005, con los diseños de la poética pintura penetrante de Cándido Bidó, hicieron acto de presencia, con su singular estilo, en el que abundan los colores y las formas.

El 2006 sirvió para ampliar la propuesta, con la celebración de los 100 años del natalicio de Yoryi Morel. Entonces el Autorretrato, Los Flamboyanes, La Fiesta Campesina y Pelea de Gallos, adornaron cada una de las piezas que conformaron la colección de ese año.

La quinta colección de “Arte de Café”, en el 2007 fue engalanada con la obra del artista Plutarco Andújar.

En el 2008 Elsa Núñez enfatizó la presencia de un mundo emotivo interior, intenso y dramático, en la sexta colección dispuesta por Casa Cuesta.

En la séptima entrega Teté Marella desbordó su arte para dejar en la colección figuras femeninas con cierta vivacidad y languidez que desprenden ropajes de épocas anteriores y damas redondeadas, apacibles, sensuales y lúdicas como elementos principales de su obra.

La octava colección le rindió homenaje a Jorge Severino, contando la historia de la negritud, inventada quizás, de un pasado glorioso que es más cercana al futuro anhelado que al pasado al que invoca. Pero sus figuras reposadas, sedentes, también ocultan sortilegios, augurios, encantamientos. La clave puede residir en un dije o una ajorca, en ese pendiente o en aquel azabache.

En la novena entrega hicimos homenaje a Amaya Salazar y a sus personajes sin rostro que habitan ambientes místicos y mágicos donde la luz y la flora de las Antillas están presentes.

La décima entrega le rindió tributo a Miguel Núñez con sus mujeres y sombrillas, verdes paisajes y nuestras calles de la Zona Colonial.

En la décima primera entrega el agasajo fue para Silvio Ávila, honor al dibujo y al color, instrumentos narrativos de un sueño para alcanzar la luna que sintetiza las fuerzas del don de anhelar.

En esta décimo segunda edición le rendimos honores a la obra de Antonio Prats Ventós, quien caracteriza su obra con el trópico que tanto amó y que reflejó tanto en su obra escultórica, pinturas y dibujos. Su pintura fue monumentalista y ornamental, registrando un arquetipo idealizado de la mujer criolla, tocada con turbantes de colores, diseños de telas diferentes que por tanto resultaban el punto de mayor impacto.